Lo que un espejo nos devuelve.
Creo que a todo el mundo le pasa: en casa podemos tener varios espejo, pero hay uno y sólo uno que nos devuelve la imagen que queremos ver. Igual nunca nos hemos preguntado por qué, pero sin duda mucho tendrá que ver con la iluminación de la estancia.
Lo ideal es que no esté focalizada justo encima de tu cabeza ya que hará que aparezcan inquietantes sombras, sobre todo bajo tus ojos. Mucho mejor si la iluminación viene de ambos lados del espejo, en sentido longitudinal, suave, matizante, alisando tu piel.
Esto lo saben de sobra las tiendas, donde el objetivo es conseguir que su espejo te devuelva tu mejor tú. En este sentido estudian variables tales como la potencia lumínica o la reproducción cromática.
La potencia lumínica no es mas que que la intensidad luminosa de una fuente de luz, que regulan en función del público objetivo o la imagen de marca.
El índice de reproducción cromática es aquel que mide
la capacidad de la fuente de luz para reproducir fielmente los colores
de los productos o artículos. Se trata de una escala que va del cero al
cien, cuanto más cerca estemos del 100, los colores se mostraran de
manera más fidedigna, resaltando mucho mejor las cualidades del producto.
Alucinante lo que sólo la iluminación puede influirnos.
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